sábado, 12 de mayo de 2012

¿Cómo reconocer un caso de grooming o child grooming?


El grooming es uno de los ciberdelitos más peligrosos dentro de los –ING (grooming, ciberbullying, sexting o hacking) ya que atenta directamente contra el derecho a la libertad e indemnidad sexual de los menores. Sus principales víctimas según los estudios son niñas de entre 15 y 17 años.  Dicho de esta forma, en términos penales o jurídicos, el grooming puede parecer algo frío o distante, no obstante podemos asegurar que las ocasiones en las que un menor ha sido víctima de grooming nos demuestran la gran necesidad de que padres y educadores estén muy alerta sobre lo que hacen sus hij@s en Internet.
El grooming o child grooming suponen la misma conducta: el acecho de realiza un adulto a uno o varios menores a través de las TIC, principalmente Internet o teléfono móvil, con la intención final de conseguir un encuentro sexual en el que poder abusar del menor. El matiz que diferencia estos dos conceptos es que el Código Penal español, tras su última modificación en LO 5/2010, castiga específicamente el child grooming que supone el acoso sexual a menores de 13 años por Internet, según el nuevo artículo 183 bis:
“El que a través de Internet, del teléfono o de cualquier otra tecnología de la información o la comunicación contacte con un menor de trece años y proponga concertar un encuentro con el mismo a fin de cometer cualquiera de los delitos descritos en los artículos 178 a 183 y 189, siempre que tal propuesta se acompañe de actos materiales encaminados al acercamiento, será castigado con la pena de uno a tres años o multa de ...”
Los artículos 178 a 183 y 189 se refieren a los delitos de agresión sexual, abuso sexual y otros relativos a la prostitución y corrupción de menores, que por su gravedad dan buena cuenta de la importancia de prevenir el child grooming. De este modo grooming sería la misma conducta realizada a menores que superan los 13 años y hasta los 17.

Habitualmente es un proceso que puede durar semanas o incluso meses, y que suele pasar por distintas fases, de manera más o menos rápida según las circunstancias que rodean a la víctima. Tal y como define el Código Penal, cuando hablamos de child grooming nos referimos específicamente a la conducta realizada por adultos que a través de las TIC intentan contactar con menores de 13 años con la finalidad de mantener encuentros sexuales. Los autores de grooming o child grooming pueden simular ser también menores para ganarse la confianza de su víctima. Empiezan actuando como un menor normal, realizando preguntas tipicas: ¿cómo te llamas?, ¿cuantos años tienes? ¿de dónde eres?. Pero pronto empezarán a pedirles fotografías o videos de contenido claramente sexual en las que aparezca su víctima. Para una rápida detección del grooming, estas son sus principales fases:
Los adultos se registran en redes sociales frecuentadas por adolescentes, normalmente con una identidad ficticia que no haga sospechar sus verdaderas intenciones. Aparentarán una edad similar a la media de los menores usuarios de esta red, utilizando para captar a sus víctimas y establecer contacto además de sus perfiles en redes sociales, el correo electrónico, salas de chat o mensajes SMS.
Una vez iniciado el contacto con menores, tras las preguntas rutinarias, seleccionarán aquellos menores que vean más vulnerables y propensos a caer en sus lazos, que no son otros que los menores que pasan largos periodos de tiempo delante de sus ordenadores, en habitaciones alejadas de cualquier control paterno y sobre los que no se ejerce una supervisión en su navegación o esta es poco eficaz.
El autor del grooming va ganándose poco a poco la confianza del niñ@. Mientras se desarrolla esta fase comienza a obtener fotografías suyas y abundantes datos personales como su edad, género, domicilio, si tiene herman@s mayores o menores, si sus padres están cerca cuando utiliza Internet, si alguien controla su navegación, a qué colegio va y demás datos que posteriormente utilizarán para el chantaje.
Pueden utilizar diversas técnicas de seducción para convencer a los menores, o sencillamente los groomers comienzan a enviar imágenes de contenido pornográfico que han obtenido de otros menores víctimas de grooming, haciendo ver que es algo normal.
De cualquier modo consiguen que su víctima acceda a desnudarse delante de la web cam y/o se haga fotografías o vídeos a sí mismo de partes íntimas de su cuerpo, que enviará a través de correo electrónico, mensajería instantánea o cualquier otro medio tecnológico similar.
Cuando obtienen las primeras imágenes de contenido sexual comienza el verdadero ciberacoso, también conocido como sextorsión, en el que exigirán nuevas fotografías y vídeos a la víctima para obtener más material pornográfico de menores. O incluso intentarán conseguir un encuentro físico con el/la menor para abusar sexualmente de él/ella. Pueden utilizar cualquier tipo de amenaza, coacción o engaño para manipular a su víctima y conseguir su propósito. En esta fase el groomer hará uso de toda la información personal que ha obtenido con anterioridad.
Es habitual que el groomer amenace con publicar las fotografías o vídeos de contenido sexual que ha obtenido previamente en redes sociales donde  puedan reconocer a su víctima, con enviarlas a otros contactos e incluso con informar a sus padres sobre lo que han estado haciendo, todo con el fin de atemorizarle y que acceda a sus peticiones. Algunos autores de grooming sin ningún escrúpulo, llegan a amenazar al menor con causar daño físico a sus familiares alegando que saben sus nombres, donde viven y demás datos.
Como la gran mayoría de delitos cometidos a través de Internet, el uso de la Red facilita a los autores del grooming la sensación de anonimato, pudiendo estar durante meses o años cometiendo este tipo de delitos sin ser identificados.
Para la detección a tiempo de casos de grooming, además de establecer un adecuado control en la navegación de los menores, debemos tener en cuenta que el acoso puede exteriorizarse en cambios de conducta, que pueden ser el primer indicio de que algo raro está ocurriendo. Estos cambios pueden variar según la personalidad y características del menor afectado, citamos los más habituales:
Ø      Modificaciones inexplicables de sus rutinas.
Ø      Disminución de rendimiento escolar.
Ø      Ansiedad.
Ø      Pérdida de confianza en sí misma.
Ø      Aislamiento familiar y social.
Ø      Actitud hostil con padres y/o herman@s.


viernes, 11 de mayo de 2012

Presentaciones de Tranki Pap@s.

Por suerte ya tenemos calendario de presentaciones para Tranki Pap@s. Vamos a poder estar en varias provincias, entre ellas Castellón, Barcelona y Ávila. Desde nuestro blog queremos agredecer a cada una de las librerías donde vamos a hacer las presentaciones el tiempo que nos brindan para poder hablar de Tranki Pap@s y de sus contenidos basados en aportar las herramientas a padres y educadores para prevenir que los menores se metan en líos en Internet.

De momento este es el calendario que tenemos previsto:

CASTELLÓN:
- 18 de mayo de 2012 (viernes) a las 19:30 horas en la Librería ARGOT - C/ San Vicente nº 16, de Castellón.
- 01 de junio de 2012 (viernes) a las 19:30 horas en la Librería AMBIT - C/ del Maetro Josep Segarra nº 3, Benicassim (Castellón).

AVILA:
- 24 de mayo de 2012 (jueves) a las 19:00 horas en la Librería LETRAS - Paseo de San Roque nº 12, Avila.

BARCELONA:
- 20 de junio de 2012 (miércoles) a las 19:15 horas en la Librería EXCELLENCE - C/ Balmes nº 191, Barcelona.


domingo, 6 de mayo de 2012

Educar y no espiar.

Cuando hablamos de nuestros hij@s en la Red, no son pocos los padres que se preguntan, a tenor de los peligros que les acechan, si la prevención está muy por encima del derecho a la intimidad que sus propios hij@s pueden acabar reivindicando. Lejos de querer instaurar un “pódium” sobre qué derecho prevalece sobre el otro, desde el libro TRANKI PAP@S hacemos hincapié en los distintos modos en los que un padre o una madre puede saber del mundo virtual de sus hijos. Preferimos que los Pap@s se creen un perfil de usuario con su propia identidad, a que lo hagan con uno falso para así poder espiar a sus hij@s. Preferimos siempre el que se fomente el diálogo explicándole al menor qué peligros le acechan para que sea él, y sólo él, quien madure sobre ello y en el caso de que detecte algún comportamiento extraño de uno de sus contactos en la red social en la que esté, chat o foro, lo comunique a sus padres. Si el libro TRANKI PAP@S nació, fue precisamente para educar a los padres en el actual panorama que representa Internet, educar a los padres en los conocimientos básicos, los peligros más emergentes y las herramientas para evitar estos. Una vez los padres y madres sean educados en ello, la misión principal es educar al menor. Educarnos para poder educar, no nos cansaremos de repetirlo. Una vez se inicie ese proceso educativo por parte de los padres, creemos que un buen lema en relación al derecho de intimidad de nuestros hij@s sería el de “Libertad  según responsabilidad”. Con ello queremos decir que contra más responsable sea nuestro hij@ (su edad es un factor determinante), mayor autonomía podemos darle, y ante faltas de responsabilidad, la restricción de esa autonomía sería el camino a seguir. Si nuestros hij@s nos engañan en lo que al uso de las TICS se refiere, invitamos a un diálogo basado en nuestra propia “experiencia vital” como padres, un diálogo en el que se le explicará que ha faltado a nuestra confianza, y eso le ha llevado a tener menos autonomía hasta que nos demuestre que merece recuperar esa confianza, y por ende esa mayor libertad que no es otra cosa que ejercer su derecho a la intimidad. No defendemos el controlar a escondidas. La solución pasa por enseñar. Si los padres no escuchan las conversaciones de sus hij@s (en el patio del colegio, en el móvil,…), tampoco lo deben hacer online. Hay que tener en cuenta que una cosa es espiar y otra muy diferente, impedir que entre en un chat sexual. Cosa que realizan los denominados Controles Parentales y que no vulneran en ninguna ocasión el derecho a la intimidad de nuestros hij@s. Sin embargo estos Controles parentales no son más que una herramienta más de las que proponemos en Tranki Pap@s, por lo que no aconsejamos que se delegue en ese determinado software la plena educación virtual de nuestros hij@s. Hablar con nuestros hij@s acerca de qué nuevos contactos, hasta la fecha desconocidos, han accedido a su red social, qué tipo de correos electrónicos “extraños” ha recibido, saber en qué redes sociales tienen nuestros hij@s perfiles creados, conocer si ha concertado alguna cita con alguien que haya conocido por Internet, estar atento a algún cambio en su conducta, estado anímico o rendimiento escolar,… Todo ello, no es espiar, es como todos bien sabéis, educar de manera activa, atendiendo a las emociones de nuestros hij@s e intentando que desarrollen su madurez en el mundo virtual con las mismas garantías con las que nos esforzamos para que así sea en el mundo real, por cierto, cada vez más fundidos nos guste o no. Educar y no espiar , en nuestra humilde opinión, pues no somos psicólogos, es la respuesta a cualquier posible vulneración de la intimidad de nuestros hij@s.

jueves, 3 de mayo de 2012

El control parental de Google: el filtro Safe Search.

De todas las herramientas de control parental que hay disponibles, nos ha llamado la atención una de ellas de muy fácil manejo que nos puede ayudar a realizar un control más efectivo. Es el control de seguridad familiar desarrollado por GOOGLE que podrás encontrar en http://www.google.es/familysafety/. La compañía GOOGLE INC tampoco ha querido quedarse atrás en el desarrollo de métodos que contribuyan a que la navegación por Internet sea una experiencia más segura especialmente para menores y jóvenes. La propia compañía en su página web afirma que sus objetivos en lo referente a seguridad familiar son:
 
Ø      proporcionar herramientas para que los padres y los educadores seleccionen el contenido al que pueden acceder los niños en Internet,
Ø      ofrecer consejos y sugerencias a las familias relacionados con la seguridad en Internet,
Ø      colaborar con organizaciones (por ejemplo, instituciones benéficas), con otras empresas del sector y con instituciones gubernamentales dedicadas a la protección de menores.
GOOGLE pone a disposición de cualquier usuario el filtro SafeSearch, diseñado para excluir sitios que incluyan contenido sexual explícito y para eliminarlos de los resultados de búsqueda. Esta utilidad ofrece varias opciones de filtrado (moderado o estricto), pudiendo proteger la configuración que has realizado estableciendo una contraseña para que ningún otro usuario pueda modificar el filtro SafeSearch. Si eres usuario de este buscador puedes configurar todas estas opciones de control parental haciendo clic en la opción configuración de búsqueda situada en la esquina superior derecha de la página principal de Google y activando la opción “bloqueo de SafeSearch”.
 
Uno de los productos más populares de esta compañía es YOUTUBE, donde se pueden subir, buscar y visualizar videos de muy variada temática. Youtube es un sitio web pensado para alojar contenido desarrollado por sus usuarios, no estando pensado para que sea utilizado por menores de 13 años. Youtube dispone de unas normas de uso que describen los contenidos que están permitidos y los que no. No obstante puede interesarnos evitar que aparezcan cierto tipo de contenidos si los menores son usuarios de Youtube, bien sea a través de un PC, un teléfono móvil, smartphone o tableta. Para ello podemos activar el modo de seguridad que evitará que aparezcan videos que incluyan contenidos para adultos o que presenten restricciones de edad, en las búsquedas que se realicen de videos, en los videos relacionados, en los programas o en las películas.
Además de estas medidas de control parental que puedes configurar fácilmente, en el control de seguridad familiar puedes encontrar otras informaciones de interés sobre protección de menores en la red, como consejos de organizaciones colaboradoras dedicadas a la protección infantil en España o sugerencias de padres que trabajan en Google que hablan de la forma en que administran la seguridad de sus hijos en la red.

8 consejos a seguir si un menor en víctima de un ciberdelito.


Por nuestra profesión estamos convencidos de que para evitar un delito lo principal es prevenir su comisión. A lo largo de TRANKI PAP@S ponemos al alcance de cualquier persona las herramientas y conocimientos básicos que pueden ayudar para evitar madres, padres o educadores y los menores a su cargo, se vean involucrados en una experiencia de este tipo. Si a pesar de todo esto, un menor ha podido ser víctima de algún delito cometido a través de Internet, recomendamos seguir los siguientes consejos:
1.- Averigua con exactitud qué ha ocurrido. Te ponemos un ejemplo: debemos saber con certeza si alguien ha utilizado alguna fotografía de tu hij@ para crear un perfil en una red social donde le insultan, o si por el contrario ha recibido correos electrónicos con amenazas, o está siendo acosad@ a través de la red por un desconocido para que le envíe fotografías desnud@.
2.- Determina cuánto tiempo hace que se produce esta situación. Muchas situaciones de abuso en la Red, se han manifestado previamente en la vida real, como en el colegio, instituto, o entre las amistades más cercanas.
3.- Averigua por propia iniciativa los datos disponibles sobre el autor/es para la investigación. Por ejemplo cuales son las direcciones exactas de correo electrónico que ha utilizado. Recuerda que la diferencia entre un guión bajo, guión medio o un punto, en una misma dirección de correo electrónico puede suponer que sean tres direcciones de correo electrónico diferentes.
4.- Aporta las direcciones web y direcciones URL de las páginas web y perfiles de redes sociales donde hayan ocurrido los hechos. Una web, blog o red social es como el “lugar de los hechos”, de donde se puede obtener mucha información. Si no sabemos donde han ocurrido los hechos, no podremos hacer una investigación completa que nos permite obtener todas las pruebas.
5.- Es preferible que imprimas todos estos datos para aportarlos, a que los escribas en un papel. Si no dispones de impresora puedes ejecutar “capturas de pantalla” y grabarlas en una memoria externa para luego presentarlas en dependencias policiales. De este modo evitaremos errores de trascripción, que créenos, son muy frecuentes.
6.- Asesórate bien antes denunciar. En ocasiones hay conductas en la Red que aunque pueden parecernos reprochables, no son delictivas, por lo que las medidas se deberían adoptar en otro ámbito, como el escolar, familiar, ayuda de terapeutas o psicólogos, etc. No dudes en consultar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad más cercanos a tu domicilio. Hay formas de contactar con la policía por Intenet, correo electrónico y por supuesto, por teléfono.
7.- En todos estos pasos no olvides estar tranquil@. Una reacción desmesurada podría acarrear más problemas. Recuerda que el diálogo con los menores, también sirve para solucionar otros conflictos, bien sea entre menores, o entre menores y adultos.
8.- Es muy recomendable que el menor afectado acuda también a la Comisaría. Si finalmente decides denunciar los hechos ante la Policía, siempre que sea posible que el menor afectado te acompañe, ya que puede aportar información que tú no sabes. Puede que no te haya contado detalles y seguramente sabrá explicar mejor que nadie lo que ha estado ocurriendo. Piensa que los Policías sabemos en un primer momento lo que tú y tu hij@ nos contéis.
En nuestras investigaciones podemos dar fe de que cuando un menor víctima acude a una comisaría en compañía de sus padres para denunciar un ciberdelito, en cuanto nos ponemos a hablar “en su idioma”,la información fluye y en la gran mayoría de las ocasiones se convierte en un colaborador esencial en la investigación. El menor se siente cómodo con nosotros simplemente porque estamos en su mundo virtual y deja de vernos como policías adultos.
Ten en cuenta siempre que la culpa de que se haya cometido un delito la tiene el delincuente. De poco sirve alarmarnos o perder los nervios cuando somos víctima de un delito o cuando un menor a nuestro cargo lo es. Conocemos de sobra los sentimientos que aparecen en las personas cuando son víctimas de alguna conducta delictiva y cuando las víctimas son sus propi@s hij@s. Los delitos cometidos por Internet tienen un carácter especial, ya que el anonimato que supone la red hace que delincuente y víctima tengan una relación diferente a la que se da en otro tipo de delitos, especialmente cuando la víctima es una persona que por sus circunstancias especiales (minoría de edad) es más vulnerable.


miércoles, 2 de mayo de 2012

Objetivo de TRANKI PAP@S

Cualquier padre le dice a sus hijos que no se pare a hablar con extraños cuando salga de casa. ¿Por qué motivo cuando este niño está conectado a Internet, sus padres no le advierten de lo mismo?.

Según nuestra experiencia acumulada durante años trabajando en el ámbito de delitos cometidos a través de Internet, en la gran mayoría de los casos en los que la víctima es un menor de edad, la causa fundamental viene determinada porque sus padres no han ejercido el control y prevención necesario por su parte. Una vez detectado el abuso por parte de los padres o tutores, es frecuente oír explicaciones en el sentido de que han dejado a sus hijos durante horas y horas, durante semanas y semanas, a lo largo de muchos meses, delante del ordenador, sin ningún tipo de vigilancia y sin interesarse de forma adecuada por lo que el menor ha estado haciendo durante todo ese tiempo.

En las manos de los niños está el futuro y la cultura, pero en las nuestras está velar de forma adecuada por su protección y por su derecho a tener una infancia tranquila y feliz. En este sentido, se plantea como uno de los objetivos fundamentales de TRANKI PAP@S concienciar a los padres de la importancia de la siguiente reflexión: si no abandonarías a un niño en la calle, no lo abandones en Internet.

Edúcate para Educar con TRANKI PAP@S

El avance que las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC) están teniendo en la sociedad actual no ha dejado al margen a los más jóvenes. Los niñ@s, como los adultos, son grandes usuarios de Internet y de la telefonía móvil, por lo que igualmente están expuestos a todos aquellos riesgos que conlleva el uso de las TIC sin la correcta supervisión y formación. Como principales usuarios de Internet, los menores se han convertido en víctimas potenciales de cualquier delito o situación de abuso a través de la red, siendo fundamental para una correcta prevención que madres, padres y educadores, desde su posición de garantes del bienestar de los más pequeños, asuman el reto de educarse para poder educar y guiar los primeros pasos de los menores en Internet.
Desde la perspectiva y experiencia de dos Policías especializados en la investigación y lucha contra los delitos relacionados con las nuevas tecnologías, en TRANKI PAP@S se pretende enseñar de forma clara y con un vocabulario accesible para cualquier persona, cuales son los principales riesgos que existen en Internet para los menores y los métodos más eficaces para prevenirlos. No es un manual de informática o de seguridad en la red. TRANKI PAP@S es una guía de orientación a seguir por aquellos padres y educadores que no están suficientemente familiarizados todavía con el uso de Internet, las redes sociales, el correo electrónico y todos sus riesgos, o simplemente que deseen aprender más sobre este apasionante mundo.
En TRANKI PAP@S podrán encontrar la información suficiente para conocer los delitos y abusos más habituales que se pueden producir en Internet, como el grooming, ciberbullying o la pornografía infantil, así como los pasos a seguir para poder prevenir a tiempo que nuestros hijos sean víctimas de cualquiera de estas conductas abusivas.
Por primera vez en el sector editorial dos miembros en activo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad dedicados a la persecución e investigación de este tipo de delitos, revelarán cuales son los riesgos más habituales para los menores en Internet y los pasos a seguir para poder prevenirlos eficazmente, basados en una adecuada formación e información dirigida a padres y educadores.
TRANKI PAP@S pretende ser un manual de apoyo, de consulta y ayuda para quienes tengan ganas de aprender sobre los riesgos a los que están expuestos los menores, cómo prevenirlos de forma fácil y sencilla, adquiriendo unos conocimientos básicos y principalmente, sabiendo a qué tipo de problemas nos enfrentamos. Trata de proporcionar los principios elementales para que los adultos podamos estar a la altura de las exigencias de los pequeños navegantes, de sus necesidades, su desarrollo social, educativo y por supuesto, de una sociedad que cada vez nos exige más en materia de nuevas tecnologías.

¿Qué es TRANKI PAP@S?

Como el mismo título sugiere, TRANKI PAP@S, es un manual ameno, sencillo y de lenguaje directo, cuyo objetivo es que ningún padre o educador de menores, se quede atrás respecto a las tecnologías de la información y comunicación (TIC). El muro del “FACE”, “mi perfil de TUENTI”, “hazme un twitt”, “nos whatsapeamos”,… no dejan de ser expresiones cotidianas que no deberían ser ignoradas por los padres de hoy. Internet tiene innumerables ventajas y colateralmente algunos riesgos, y estos, cuando se trata de menores, merecen ser conocidos para poder prevenirlos, o en el peor de los casos, solucionarlos. Internet crece y si no queremos que entorpezca nuestras relaciones paterno filiales, hagamos de la Red precisamente un nexo común para que padres e hijos disfruten, compartiendo su tiempo en ese mundo virtual con consecuencias directas en el mundo real. 
De la mano de dos expertos en la materia y basándose en casos reales, Trankis Pap@s consigue que el lector pierda el miedo a Internet y pueda abastecerse de las herramientas necesarias para prevenir los riesgos que presenta la Red hacia los pequeños navegantes.
tranki-paps_9788497545976.JPG
Un manual para aprender a para proteger a niños y jóvenes contra los peligros de Internet.

martes, 1 de mayo de 2012

Book trailer de Tranki Pap@s

Echa un vistazo a este vídeo. En él mostramos algunos datos y reflexiones sobre la importancia de supervisar a los menores durante su navegación en Internet.